Durante muchos años viví avergonzada de quién era, atrapada en una imagen que no me representaba pero que me definía a los ojos de los demás. Mi apariencia, marcada por el sobrepeso y la obesidad, me hacía sentir que no tenía derecho a hacer muchas cosas que en el fondo deseaba, como usar un peto o disfrutar sin complejos de mi cuerpo. 

Con el tiempo, esos prejuicios me llevaron a crear una personalidad que no era mía, una versión fabricada para encajar y evitar los juicios ajenos. Llegó un momento en el que ni siquiera yo me reconocía. Incluso despues de la cirugía bariátrica, me daba vergüenza admitir que había recurrido a ella, temiendo ser juzgada como "menos capaz" o "tramposa por tomar el camino fácil". Seguía escondiéndome, negándome a ser yo misma. 

Todo cambio cuando decidí reconciliarme con la comida, un proceso que me ayudó no solo a sanar mi relación con lo que comía, sino también a redescubrir mi verdadera escencia. 

Aceptar mi autenticidad ha sido liberador; ahora puedo mirarme al espejo y reconocerme, usar un peto aunque no tenga el cuerpo perfecto.

Reconocerte y aceptar tu autenticidad es un acto de amor propio que transforma vidas. Reconciliarte contigo misma y con tu historia es el primer paso hacia una versión más libre y auténtica de ti. 

Si este mensaje resonó contigo y sientes que necesitas apoyo para comenzar o continuar este camino, no dudes en contactarme. Estoy aquí para acompañarte en tu proceso y ayudarte a descubrir el poder que hay en abrazar quién realmente eres. Juntas podemos crear cambios que perduren y te acerquen a tu mejor versión.

Escribeme si tienes dudas o si quieres mas información! 

Con cariño,

Vania Monserrat

Coach de hábitos y bienestar Post - Bariátrica